01 de enero de 2006 - 25 de diciembre de 2008

La noche del 25 de diciembre, recibí el regalo mas importante que alguien puede recibir... una aclaración desde el alto cielo... donde mi padre celestial, me dio muestras de que he tomado decisiones acertadas... Lo mejor fue alejarme de ti. Eras el camino directo hacia mi perdición y mi arrepentimiento. Estuve a punto de caer en tus redes, pero algo (o alguien) siempre me rescataba. Le doy gracias a Dios, el que me haya abierto los ojos del alma, y haya visto mas allá. Aunque el sentimiento que tengo es de profundo odio, hacia tu persona, se que pensando en DIOS y en su inmenso amor, podré erradicar ese malvado sentimiento de mi ser. Te quise, y fuiste el mas grande dolor de cabeza que existió en mi vida. Pero no me arrepiento de lo que sentí, porque no me negaré al amor, no me negaré a sentir, ya sea por miedo o rechazo. Me enseñaste muchas cosas y por eso te agradezco de igual manera a como si no hubiera pasado nada de lo que pasó en nuestras vidas. Solo espero que seas feliz, con la persona que elegiste, aun cuando el odio...

...el odio sea más fuerte...

A veces suelo ser algo "cursi".

Hoy me encuentro aquí, recordándote en mis oníricos sueños, donde el príncipe azul viene a rescatar a su princesa, en un unicornio, brindado por una hermosa hada, sentada en el centro de una rosa, mostrando sus sexies piernas, concediéndonos todo el amor del mundo, a través de sus hermosos y celestiales ojos. Que tonta al pensar que serías mi príncipe azul. El que me sorprendería con flores, ese príncipe sonriente y bonachón con el que tanto soñé...

Esperé y esperé tu llamada, esa que con tantas ansias respondí... Sí, eras tú, pero para pedirme un favor. Me siento utilizada, me siento apenada, me siento infeliz!!!

Te quiero, príncipe encantado... Aunque te hayas convertido en sapo.

¡No Existo!

Ya no soy esa niña linda y alegre que algún día fui.

Me convertí en un payaso, un bufón con sonrisa falsa.

Una caricatura con ribetes tristes, corazón desolado y coraza de fuerza.

Me convertí en un monstruo, movilizado por sus propias frustraciones.

Un ser sin aspiraciones, sin colores, sin vida.

Adios 25.

Cuando quedan alrededor de 30 minutos para que den las doce de la noche, me encuentro en la soledad de mi habitación, escuchando a Lou Reed, con una lágrima rodando en mi mejilla. Pensando que talvez he perdido los últimos 25 años de mi vida, estancada en cuatro paredes, sin saber como actuar.La pena me embarga, mientras suenan las primeras notas del piano de “perfect day”. Retomo mis lineas, mientras tomo un pañuelo y limpio mis ojos.

Me voy acercando a pasos agigantados a los 30. En pocos minutos cumpliré 26, y dejaré atrás unos 25 que me acompañaron en las buenas y en las malas, unos 25 que me hicieron sufrir y no supe entender el porqué. Espero haber aprendido algo de él.

Hasta siempre primer cuarto de siglo, hoy comienzo a escribir el segundo, no con las ganas que debería, con penas y amarguras que me atan a una oscura realidad. Espero que sea el comienzo de una vida, y no el comienzo de el fin.

Esta soy yo.

Yo no soy dulce,

Ni soy la niña de las flores.

Solo soy...

Y ese es el problema!

Mientras mas camino por el sendero de la vida, me doy cuenta de que no se vivir. Millones de veces, he intentado comenzar de nuevo. Pero no sé como. Siempre termino huyendo de situaciones y personas que amenazan mi estancamiento. Se esfumaron las ganas de escribir, de pensar, de disfrutar, de vivir... es extraño. Mis motivaciones se paralizaron. La niña alegre, despistada y amorosa, descanza en paz. Y se abre paso, la adulta sin aspiraciones.
Quiero crecer, señores bloggeros. No quiero arrancar más. Quiero vivir, pero mis estados de "vejez" no me dejan avanzar.
Estoy tomando las famosas "pastillas de la felicidad", pero no sé si están haciendo efecto. No quiero seguir así, no debo estarlo. Estoy entre la espada y la pared. Siento que no puedo más. Quiero superar los fantasmas que atacan mi existir y volver a sonreir. Vamos, avancemos con optimismo, y vuelve a ser la chiquilla risueña de siempre... vamos que se puede.

Amo mis zapatillas.

El mejor regalo que puedo recibir en mi vida, son zapatillas. A mediados de los 80's, cuando era una pequeña niña, recibí mis primeras "North Star", esas que tan de moda estaban. Las típicas blancas con celeste, esas que usaban "Los Prisioneros" en sus inicios. Mi recuerdo mas latente, es estar probándome las "tillas" frente a la chimenea. Ahí comenzó el romance con mis inigualables compañeras de vida.

A veces me pongo a pensar en lo mal que las tratamos, cuando han estado ahí, contigo, aperrando en todas. En lo bueno y en lo malo, en el sol y en la lluvia, en lo más doloroso y en lo mas light de la vida. Y que es lo que haces tu? Cambiárlas. Porque están feas, roñosas e indecentes.

Las "tillas", te sostienen. Sostienen esa pesada carga que debemos llevar día a día. Por eso he tratado de unir lo "material" de una zapatilla, con lo sentimental. Para reflexionar sobre lo simple de la vida, de lo que tenemos y no valoramos, porque lo encontramos "poca cosa"o rídiculo.

Mis "tillas" son la compañía y comodidad que necesito. Mi más sincero homenaje. ¡Las amo!

Notas de un suicida.

Aún no logro distinguir que es lo que me tiene tan decontenta, desganada y aburrida de la vida. Y es que realmente estoy cansada de vivir. Me siento ahogada. A veces me cuesta respirar. No encuentro salida ni veo colores. Últimamente me he sentido cansada, stressada, agotada. Muchas noches no he podido dormir. Y en muchas ocaciones no puedo despertarme. A veces siento que no puedo seguir, pero tengo el estúpido vicio de pensar en los demás. Mis tardes son grises y a menudo quiero llorar.
No se que me pasa, ando nerviosa, con culpabilidad, con un encierro mental espantoso. Mientras escribo esto, no me sale la respiración. Es terrible. Solo pienso en desaparecer. Lo peor, es que me doy cuenta de lo que me está sucediendo y no se como pedir ayuda. Estoy encerrada en mi misma. Trato de que no se den cuenta. No quiero preocuparlos. Me rio, tiro tallas y pongo música, para no cambiar mis rutinas y no llamar la atención.
Siento como si estuviera metida dentro de una caja. Sin aire. Sin espacio. Sin luz. Mi cuerpo está cansado de caminar, sin ver cambios ni logros. Mis ataduras cortan mi circulación y ya no puedo mas. La vida ya no es la que le entragaba esa alegría constante a mi alma. Ahora me siento gris. Sin fuerzas. Sin ganas. Sin motivación. A veces quisiera que todo se acabara pronto. Acostarme un día y no despertar mas. Odio sentirme así... lo odio! Mi corazón, mis pulmones y mi estomago se fusionan y se convierten en uno solo. No funcionan bien. Y creo que mi capacidad de salir del embrollo tampoco. Estoy perdiendo la capacidad que tenía de volver a levantarme. Estoy perdiendo firmeza. Estoy perdiendo mi autoestima. Estoy perdiendo minutos y segundos preciosos de mi juventud. Estoy perdiendo la capacidad de vivir las cosas simples, estoy perdiendo... la vida!

A 10 años de esta belleza.

Recuerdan la joyita que el "Matador" les hizo a los Ingleses en Wembley? Cuando Clarence Acuña le entrega un mini pase al "Coto" Sierra por la izquierda, y este último con un zurdazo de aquellos, conecta con Marcelo Salas y el "Matador" con el talento que lo caracteriza, amortigua con su pierna zurda y en el aire golpea el balón marcando un gol de antología... ufff! Golazo! El mejor gol que he visto en mi vida. Estoy feliz de haber tenido la posibilidad de ser participante vivencial de tan magno evento para los fanaticos del fútbol como yo.

Si, hoy es el décimo aniversario de este monumental gol, y quiero recordarlo porque lo merece. Porque sin lugar a dudas es el GOL MAS HERMOSO en la HISTORIA de CHILE. Y es el último, en mucho tiempo, que es hecho por una mega-estrella conocido en todo Europa.

Analogía.

El amor es como una fruta.

La miras,

Te gusta,

La coges,

Te la comes

Y la botas.

I Know.

Se que me aprecias.

Se que me quieres.

Se que piensas en mi.

Se que soy importante.

Se que me sueñas.

Se que te gusto.

Se que me deseas.

Pero también se...

...que no me necesitas.

Que loco ¿no?.